

Empresarios, sindicatos y gobierno ensayan un nuevo espacio de diálogo social, pero la exclusión del sindicalismo emergente y las demandas que vendrán desde Washington anticipan un proceso de alta tensión y exigencias profundas.
Empresarios, sindicatos y gobierno ensayan un nuevo espacio de diálogo social, pero la exclusión del sindicalismo emergente y las demandas que vendrán desde Washington anticipan un proceso de alta tensión y exigencias profundas.